martes, 10 de marzo de 2015

Almonaster: la única mezquita rural

En la provincia de Huelva, en lo más alto de la sierra onubense hay una pequeña y sencilla mezquita que se erigió durante el periodo del Califato de Córdoba con Abd al Ramán III, sobre un antiguo castillo visigodo del S.VI. Su nombre procede del árabe, al-munastir, término de origen latino que significa "el monasterio".


Mezquita de Almonaster la Real

 Es una de las obras islámicas más primitivas de España y de todo el al-Ándalus occidental, incluyendo el norte de África. Esto es lo que hace de ella la joya que es. Se convirtió en el emblema de Almonaster la Real porque representa toda la historia de este pueblo. Por ella han pasado romanos, visigodos, árabes, cristianos... Representa el auténtico crisol de culturas que ha sido la localidad onubense. Ha sobrevivido al clima, al gran terremoto de Lisboa de 1755, a un rayo que dañó la sala de oraciones, actualmente reconstruida.
Pero sin duda más mérito tiene aún que haya sobrevivido al ser humano. 


Como puede observarse en el plano encontramos las típicas estancias, con un patio o shan con un aljibe para facilitar las abluciones, y un alminar que después fue muy transformado.



Por suerte con la conquista cristiana en el S.XIII lo único que sufrió fueron modificaciones. Se añadió el ábside y se modificó la orientación del edificio de acuerdo al canon cristiano este-oeste, siendo consagrada como capilla de Nuestra Señora de la Concepción. Resulta extraño que quede algo de carácter musulmán después de las posteriores modificaciones. Convirtieron el alminar en campanario y el patio en una plaza de toros… 
Estos cambios pueden parecernos no demasiado agradables, puede parecernos que esto le quita magia al asunto. Pero definitivamente la magia esta en que haya quedado en pie y en que conserva un conjunto arqueológico muy importante de diferentes periodos y estilos: un ara funeraria romana, un epitafio paleo cristiano, restos del iconostasio de la antigua iglesia visigoda, un dintel visigodo que corona la entrada, numerosos fustes y capiteles romanos... 
A finales del S.XV el interés defensivo del castillo descendió y el Arzobispado de Sevilla dejó de prestar atención, lo que favoreció su deterioro.


Interior de la Mezquita


En definitiva, las cosas nunca dejaron de cambiar a lo largo de su historia. La Mezquita fue objeto de trueque con Alfonso X; Felipe II enajenó los bienes patrimoniales de la entonces Iglesia para paliar una bancarrota; también vio crecer la poblacion con la llegada de la industria... 
Actualmente es un centro cultural y una muestra de ese espíritu de cercanía con el otro son las Jornadas de Cultura Islámica de Almonaster La Real que se celebran cada octubre con la excusa de que fue declarado monumento histórico-artístico en 1931. Las jornadas se llevan a cabo en la misma Mezquita gracias a la subvención de la Diputación de Huelva y tienen el objetivo de fomentar la tolerancia, la paz y la convivencia entre diferentes culturas residentes en Andalucía.





Lejos de ser un evento de concienciación como nos podría parecer en un principio, basta ver alguna de las fotos de estas jornadas anuales para comprobar que es todo un motivo de fiesta y reclamo turístico en la zona.



Es una gran oportunidad sumergirse en una cultura que un día fue tan nuestra, poder recordar el pasado de nuestros padres para avanzar en el desarrollo de la tolerancia, pero creo más que nada es eso, una gran fiesta, un motivo de celebración. Al fin y al cabo los que se quedan perplejos al ver cómo se mantiene una cruz cristiana encima de una transcripción de la época musulmana son los turistas japoneses. Nosotros lo llevamos mucho más dentro.




Jornadas Islámicas en Almonaster la Real 




De mezquitas de ámbito rural en al-Ándalus no hay demasiados testimonios y por eso que se haya conservado Almonaster es muy interesante. Es muy importante saber que en cuanto a las formaciones islámicas medievales hay gran contraste entre una sociedad urbana y una sociedad rural. El ámbito urbano es mucho más conocido por la cantidad de fuentes, en cambio el rural no recibe atención de las fuentes, puesto que estas son elaboradas en un medio urbano.
Partiendo de esto, en cuanto al paisaje onubense, incluso el territorio urbano resulta bastante desconocido a través de las fuentes árabes, así que no debe extrañarnos que el rural sea conocido en muy poca medida. De hecho en Almonaster concretamente no se ha hecho casi ninguna excavación arqueológica  Por la escasez de registro documental podemos comprender el valor que puede tener esta mezquita tanto para estudiosos como para los propios habitantes de Almonaster y el turismo que pueden ofrecer. 

La primera vez que se menciona esta mezquita es en el año 822, en una referencia que dice:
 el iqlim de al-Munastyr y los demás de la kúra de Sevilla, recaudaron más de 35.000 dinares [...]
por el geografo musulmán  Abu Abdullah al-Bakri (Leví Provençal, 1938).

Como dice P. Guichard "Tal vez la fuentes árabes no son tan fundamentales como pensamos y solo debemos tomarlas como un esquema general". 
Tal vez si estas fuentes árabes hubieran sabido que Almonaster tendría tanta importancia en nuestros días habrían sido más generosos con las mézquitas rurales, las habrían valorado más y entonces tendríamos mucha más información. 


Fuentes

Libros

Perez Macías Juan Aurelio "El territorio Medieval II Jornadas de Cultura Islámica". Ayuntamiento de Almonaster la Real. Universidad de Huelva Publicaciones. 2001 




2 comentarios:

  1. Gracias, Ana, muy interesante. De dónde sale la cita de Guichard? Por favor, cita correctamente el libro que indicas en la bibliografía.

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  2. Hola Nuria, la cita la saqué del libro que he citado de Perez Macías. La próxima vez indicaré las páginas.

    P.Guichard cuestionaba con esta cita las fuentes árabes, que no prestaban atención a los entornos rurales al no considerarlos de prestigio, provocando que hoy en día tengamos tan poca información de la mezquita de Almonaster cuando esta tan importante para nosotros.

    Lo siento no se qué ha fallado esta vez a la hora de citar la bibliografía.

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